“De la Conciencia Ambiental”, por Raúl Coronel

Compartir

 Con pensamiento y actitud de respeto al ambiente podemos evitar catástrofes climáticas. Las grandes catástrofes ecológicas han sido un llamado para despertar la conciencia ambiental y en los tiempos actuales, instigados por una pandemia, el Cambio Climático  y el Calentamiento Global, nos exige acrecentar esa conciencia entre los individuos, sociedades y gobiernos, abogando por el respeto a los ecosistemas y la biodiversidad.

La conciencia ambiental se basa en que los recursos naturales deben protegerse y usarse racionalmente en beneficio del presente y el futuro de la humanidad. Esa convicción se funda en valores ecológicos que determinan una conducta o un comportamiento ecológico positivo. El objetivo es claro, se busca influir mediante el activismo y la educación con el fin de proteger los recursos naturales y los ecosistemas.

 

Es necesario un aprendizaje mediante una filosofía de vida para proteger el ambiente y conservarlos para garantizar su equilibrio presente y futuro.  El hombre deteriora la naturaleza con la deforestación, la contaminación del aire, la contaminación del agua y el suelo a causa de su estilo de vida moderno. Debemos hacer una gestión sustentable de los recursos mediante cambios en las políticas de estado y el comportamiento individual de las personas.

 

La problemática ambiental actual nos exige reaccionar pasando de una actitud sumisa a una actitud crítica que nos conduzca a la conciencia liberadora. Debemos lograr una alfabetización ambiental sobre la base de un conocimiento de la realidad ambiental y la identificación de sus problemas, la comprensión de los procesos sociales, históricos y ecológicos, el desarrollo de una sensibilidad ambiental, la búsqueda de soluciones y medios de acción disponibles.

 

La educación ambiental está llamada a fomentar una conciencia ciudadana mediante el desarrollo de una cultura de valores ambientalistas. La Ley argentina N° 27621 tiene por objeto el derecho a la Educación Ambiental Integral como una política nacional conforme a lo dispuesto en el artículo 41 de la Constitución Nacional y de acuerdo con lo establecido en el artículo 8º de la Ley General del Ambiente, 25.675.

 

El consabido artículo 41, que todos los habitantes gozan del derecho a un ambiente sano, equilibrado, apto para el desarrollo humano y para que las actividades productivas satisfagan las necesidades presentes sin comprometer las de las generaciones futuras; y tienen el deber de preservarlo. El artículo 8 de la Ley del Ambiente (…) la educación ambiental (…) y el régimen económico de promoción del desarrollo sustentable.

 

A su vez con el artículo 89 de la Ley de Educación Nacional, 26.206; y otras leyes vinculadas tales como Ley Régimen de Gestión Ambiental del Agua, 25.688; Ley de Gestión de Residuos Domiciliarios, 25.916; Ley de Bosques Nativos, 26.331; Ley de Glaciares, 26.639; de Manejo del Fuego, 26.815; y los tratados y acuerdos internacionales en la materia. Todo con la finalidad de despertar una conciencia ambiental.

 

La Ley N° 24.605 declaró  el 27 de septiembre de cada año «Día Nacional de la Conciencia Ambiental», en memoria de las personas fallecidas por el escape de gas cianhídrico ocurrido en la ciudad de Avellaneda Buenos Aires, ese día de 1993. Impuso que en dicha fecha se recordará, en los establecimientos educativos primarios y secundarios, los derechos y deberes relacionados con el ambiente mencionado en la Constitución Nacional.

 

El hecho que se señala ocurrió cuando Manuel Guim y su esposa María Ángela llamaron su hijo Horacio porque se estaban empezando a sentir mal. Horacio llegó junto a su esposa, Rosa Scala, y un servicio de emergencias médicas compuesto por la doctora Bibiana Otero, el enfermero Orlando Cáceres y el camillero Roberto Voytezko. Murieron, todos, en pocos minutos por inhalación de un compuesto letal que emergía de la rejilla de la casa de la familia Guim.

 

Se había vertido, de modo irresponsable, ácido sulfúrico y sales de cianuro que  se combinaron para formar ácido cianhídrico que se filtró en forma de gas hacia la superficie. El gas cianhídrico o cianuro de hidrógeno, es un veneno muy potente y fue el responsable de la muerte de estas personas. Pese al procesamiento por contaminación seguida de muerte, de los responsables del vertido, la causa judicial no prospero entre sobreseimientos y prescripción.

 

La conciencia ambiental implica conocer qué es el ambiente, cuáles son los problemas ambientales a fin de reconocer la responsabilidad individual y colectiva con relación a la preservación del ambiente. El caso puntual implica tener conciencia, respeto y compromiso con el lugar que nos toca vivir. La realidad implica despertar la conciencia ambiental todos los días del año. La Constitución nos garantiza el derecho a un ambiente sano, pero no impone la obligación de preservarlo.

 

Los científicos advierten que el Cambio Climático y el Calentamiento Global afectarán gravemente a nuestro planeta. Sus advertencias son severas estimando que en próximos 10 años ocurrirá sólo un aumento de la temperatura media global de 1,5º C no podrá evitarse y provocará efectos en cascada de múltiples episodios extremos. Si seguimos con el modelo de desarrollo actual el aumento podría ser de 3.5° C y será fatal para la humanidad.

 

Debemos fortalecer la conciencia ambiental atendiendo a los dos principales focos de ese aumento de la temperatura, el uso de combustibles fósiles y la deforestación sin control. Este es el momento cuando se habla de un Ordenamiento Territorial del Bosque Nativo y se proyecta una Ley de Humedales. Debe protegerse los sumideros de carbono como son los bosques y los humedales, para evitar ese calentamiento que colapsará el Planeta.

RAUL OSVALDO CORONEL

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *