“Crisis de pandemia y cambio climático”, por Raúl Coronel

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Los científicos vienen advirtiendo pertinazmente desde hace décadas, los dramáticos efectos del cambio climático  sobre las personas y el ecosistema, por lo que se puede decir que la situación generada por la pandemia del COVID-19 es un ensayo global de lo que padeceremos dentro de unos pocos años, como consecuencia del calentamiento global si no cambiamos de rumbo con las emisiones de los gases del efecto invernadero.

Pandemia y Cambio climático no respetan fronteras y constituyen un enemigo común para los países, atacan a todas las personas sin distinción de sexo, raza, edad y de manera más fuerte a grupos vulnerables. Implican un debate científico y las soluciones están en manos de todos los actores socialesorientados por la OMS o la Convención Marco de la ONU sobre el CC para el diseño de las decisiones nacionales.

 

La crisis de la salud pública que vivimos, debe ser vista como una oportunidad para aprender a afrontar rápidamente el mayor desafío ambiental que tenemos como humanidad que esel cambio climático CC, y que la experiencia que nos deja la pandemia, hace posible lograr acciones complejas en corto tiempo. Cuando decimos  que pandemia y cambio climático convergen con crisis similares, es porque se manifiestan como tal e impactan sobre todos los sectores, niveles, aspectos sociales y económicos.

Dr. Raúl Osvaldo Coronel
Abogado Mat.764 STJ Chaco
Especialista en Evaluaciones Ambientales

La pandemia Covid-19 obstaculiza el cumplimiento de las contribuciones de cada país, al esfuerzo global de reducción de emisiones de gases efecto invernadero GEI al 2020. Muchos países podrían elegir enfocar sus esfuerzos y recursos al reto de la salud pública, desconociendo la posibilidad de avanzar simultáneamente en todos los frentes sin descuidar el ambiental. Las contribuciones son un objetivo ambicioso del Acuerdo de París para mantener el incremento de la temperatura muy por debajo de los 2 °C respecto a la era preindustrial, y limitarlo a 1,5°C; fortalecer la capacidad de adaptación a los efectos adversos del CC y aumentar la resiliencia al clima.

 

Se está demostrando que es posible lograr acciones complejas en corto tiempo: movilizando recursos, coordinando esfuerzos, con arreglos institucionales y construyendo infraestructuras.La aparición de la crisis del coronavirus y su posterior recuperación crearán una oportunidad de encaminar el planeta hacia un camino sostenible e inclusivo. Los billones de dólares destinados a la recuperación deben servir para crear nuevos empleos y negocios de transición limpia y ecológica.Las inversiones deben acelerar la descarbonización de la economía, en la creación de empleos verdes y en un crecimiento sostenible e inclusivo sin deforestación.

 

No debe usarse para el rescate de industrias anticuadas, contaminantes e intensivas en carbono. Los fondos públicos deben destinarse a sectores y proyectos sostenibles que ayuden al medio ambiente y al clima. Se debe finalizar los subsidios a los combustibles fósiles, la emisión de carbono debe tener un precio y los contaminadores deben pagar por su contaminación. El sistema financiero mundial debe tener en cuenta los riesgos y oportunidades vinculados al clima.

 

Se pueden empezar a realizar ciertos ajustes temporales a partir de la experiencia de la tecnología en la pandemia,  como el teletrabajo y mayor dependencia de los canales digitales, que si se mantienen  mucho tiempo después del estado de alarma: reducirá la demanda de transporte y por consiguiente las emisiones de gas efecto invernadero; mejorarála cadena de valor desde lo económico, social y ambiental, que aporten beneficios para las ganancias, para la población y el planeta. Lo que no debe ocurrir es que la recuperación económica sea para políticas climáticas menos ambiciosas o flexibilizar la protección ambiental.

 

En este contextotodos los actores tendrán un papel importante, individuos, empresas, gobiernos y sociedad civil, podemos vivir la pandemia como una oportunidad para ser mejores. La resiliencia será clave para la nueva etapa y es ahí donde no podemos olvidarnos del ambiente, más bien deberá ser el centro de nuestra reflexión.La grave recesión económica que enfrentarán los países de América Latina y el resto del mundo post pandemia puede ser una excusa para que los países disminuyan la reducción de emisiones de GEI, enfocando sus estrategias financieras de recuperación en la extracción de hidrocarburos y minerales.

 

Adaptación al CC: Son las iniciativas y medidas para reducir la vulnerabilidad de los sistemas naturales y humanos ante los efectos reales o esperados de un cambio climático, reducir las consecuencias negativas del CC y aprovecharlas. Resiliencia al clima: la capacidad de los individuos o comunidades para resistir, absorber, adaptarse y recuperarse frente a perturbaciones en su entorno, para enfrentar bien un clima que es variable y cambiante.

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