Grave tala de árboles centenarios en Río Muerto: se trata de especies de quebracho blanco y algarrobo

Compartir

Ocurrió en el predio del ferrocarril de la localidad de Río Muerto, Chaco, donde se cortaron un total de cuatro árboles centenarios, de las especies de algarrobo y quebracho blanco.


El hecho resulta indignante, sobre todo en el marco de la sequía e incendios en la región. Aun no hay una respuesta por parte del municipio sobre el motivo de la tala de estos árboles nativos.

Desde Voluntarios Ambientales repudiaron este accionar, sobre todo al tratarse de árboles centenarios. Asimismo, se comprometieron a poner en conocimiento a las autoridades correspondientes de Ambiente de la Provincia.

Río Muerto es la última localidad chaqueña sobre la Ruta Nacional 16, a 6 km del límite con la Provincia de Santiago del Estero. Depende administrativamente del municipio de Los Frentones, a cargo de la intendente Judith Gómez.

El algarrobo y el quebracho blanco, dos especies emblemáticas del Chaco

El algarrobo es un árbol perenne, grande, de hasta 10 metros, aunque su altura media es de 5 a 6 metros. Tiene las hojas: alternas, compuestas, y pinnadas. Los foliolos son de forma ovalada, de color verde oscuro y brillantes por el haz y pálidos por el envés. Las flores son pequeñas, rojas y sin pétalos. El fruto, llamado algarroba o garrofa, es una legumbre (vaina) colgante de entre 8 a 20 centímetros, de color chocolate cuando alcanza la madurez.

Las flores aparecen en verano y principio del otoño, cuando maduran los frutos del año anterior. Es característico el olor dulzón que desprende el árbol cuando se encuentra en floración.

Suele vivir, como individuo espontáneo y aislado, en suelos secos y poco fértiles, en laderas soleadas y bañadas por la brisa marina. Soporta las temperaturas elevadas (40ºC) y los vientos cálidos y secos, pero le perjudica, particularmente, la humedad ambiental excesiva durante la floración.


El quebracho blanco (Aspidosperma quebracho-blanco) es una especie arbórea de la familia Apocynaceae, que habita en el centro de América del Sur.

Es un árbol alto con ramas péndulas y hojas persistentes, simples, elípticas, coriáceas y ligeramente espinescente en el ápice. Las flores hermafroditas se disponen en inflorescencias cimosas, axilares y terminales. Son de color amarillo claro y desprenden un suave perfume una vez que el árbol está en plena floración. El fruto es un folículo de 7 a 12 cm de largo que contiene numerosas semillas de forma alada.

La madera del quebracho blanco es uniformemente amarillo ocre, sin diferencias entre duramen y albura. Es bastante pesada (densidad relativa = 0,885 g/cm³) y dura, responde bien al curvado y a golpes. Mal secada, tiende a colapsar, produciendo deformaciones y roturas, por lo que ese proceso debe ser lento; la madera debe tratarse con fungicidas. Es fácil de trabajar; tiene muchos usos en carpintería (ruedas, carros, pisos, zapatos, herramientas de mano, muebles); buena para piezas de ajedrez, skies, etc. Preservada con creosota puede usarse en exteriores. En algunas partes es muy usada como carbón, no produce chispas o grandes cantidades de ceniza, y quema fuerte y despacio.

Se distribuye en el sudeste de Bolivia, gran parte del centro y norte de la Argentina, el oeste del Paraguay, y el oeste del Uruguay

  

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *